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MASTERS DE DERECHO

Sobre el Máster de Acceso a la Abogacía: Consejo de abogado a futuro abogado

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Ya era una tendencia en las últimas dos décadas y hoy es una realidad felizmente irrefutable: el alumno exige aprender de un igual, de quien ejerce, o ha ejercido plenamente el oficio.

Las clases magistrales son muy útiles en los guiones de películas en las que un carismático profesor comparte sus conocimientos con unos entregados alumnos, en una suerte de lección que nunca olvidará. Pero, como también se suele decir, eso solo pasa en las películas, ya que una sucesión de clases con ese brillo cada semana es, sencillamente, insostenible.

El alumno desea sentirse reconocido en su profesor, y en este marco, la enseñanza de un máster que prepara para dar acceso formalmente a la profesión ha de ser impartida por profesionales que serán colegas en poco tiempo, en este caso por abogados ejercientes. El teórico debe conmutar con la práctica. Quien me enseñe debe ser alguien que respire a diario lo que comparte, piensa el alumno, a quien no hay forma de quitarle la razón en este sentido.

Pero mayor es aún el esfuerzo que deben hacer las instituciones académicas en este campo cuando se trata de una máster que persigue como fin principal habilitar al estudiante para ingresar en el mercado laboral con garantías de que no será solo un sujeto que aprendió y memorizó bien la lección, sino que sabrá transponer eso al mandato de su quehacer diario como profesional.

Estos podrían ser algunos de los puntos fuertes del Máster en Práctica de la Abogacía del CEF.- Centro de Estudios Financieros, los cuales giran en torno a lo que el alumno espera: una formación práctica y unos profesores ejercientes en tiempo presente, que como pocos sabrán comprender y resolver cualquier duda del candidato sobre un escenario que compartirán ambos en poco tiempo. Otro de los pilares sobre los que se sustenta este Máster es que se oferta en tres modalidades: online, presencial (en sus centros de Madrid y Barcelona) y telepresencial.

La Ley 34/2006, de 30 de octubre, sobre el acceso a las profesiones de Abogado y Procurador de los Tribunales, desarrollada reglamentariamente por el Real Decreto 775/2011, de 3 de junio, tiene como objetivo fundamental regular una nueva forma de acceso práctica y especializada al ejercicio de la Abogacía que ofrezca unas mayores garantías a los ciudadanos a la hora de recibir un asesoramiento, defensa jurídica y representación técnica de calidad. Asimismo, permitirá homologar el acceso al ejercicio de los profesionales españoles al marco europeo.

La entrada en vigor de esta normativa ha producido que el ejercicio de la Abogacía precise de la obtención de una titulación específica: el título profesional de abogado. Para la obtención de este nuevo título, hay que superar un proceso de formación especializada de carácter esencialmente práctico que garantice que tales profesionales del Derecho gozan de la capacitación técnica y práctica precisa para el desempeño de sus funciones en el asesoramiento y la actuación ante tribunales.

Para ello, un tercio del contenido formativo se realiza a través de prácticas externas. Este sistema conduce finalmente a la superación de una prueba, diseñada por el Ministerio de Justicia, que acredita la adquisición de los conocimientos, habilidades y capacidades necesarias para el ejercicio profesional del abogado.

Ligando con lo anterior, el Máster del CEF.- destaca por su doble metodología. Por un lado, tiene un carácter práctico, con el fin de formar profesionales de la abogacía, con garantía de calidad y preparados para competir en el mercado laboral. Un Máster, que cuenta con la oficialidad de la Universidad a Distancia de Madrid, UDIMA, y que se resume en cinco palabras: “Les enseñamos a ser abogados”, afirma la doctora en Derecho Paloma Villarreal, con una larga trayectoria laboral en asesoría jurídica de empresas a sus espaldas.

En consonancia con las necesidades del mercado laboral, que reclama de una permanente especialización en determinadas ramas, el CEF.- añade a su programa formativo el Doble Máster en Práctica de la Abogacía y Tributación/Asesoría Fiscal y el Doble Máster en Práctica de la Abogacía y Asesoría Jurídico-Laboral, una apuesta segura por la inserción en áreas muy demandadas.

Y si algo tiene sentido en la formación de todo futuro jurista es su preparación en el desarrollo de juicios que resolverán cada uno de los asuntos que serán objeto de su interés profesional. En este sentido, en el CEF.- desempeñan una función determinante los simulacros de juicio, que han de prepararse desde el inicio del proceso por parte del alumno, con el asesoramiento de sus profesores, y defendida sus respectivas causas ante profesionales de acreditado reconocimiento en la materia. Como explica el jefe de estudios del Área Jurídica del CEF.-, José Antonio Sánchez, esta acción “es fundamental porque se trata de poner en práctica casos reales simulados de lo que se va aprendiendo en las distintas asignaturas del Máster, sobre todo en procesal”.

Por supuesto, si algo distingue a la formación de este grupo educativo es su atención personalizada al alumno y futuro abogado ejerciente. Se trata de afrontar esta preparación no como un trámite más, sino como una experiencia académica que fortalezca sus acreditados conocimientos durante la carrera. La preparación tanto intelectual como profesional del cuadro docente adquiere en esta ocasión, si cabe, un carácter más próximo que nunca hacia su alumnado, dando respuesta, de nuevo, a su exigencia de que quien le enseñe lo haga de abogado a abogado.

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