TikTok & Instagram Reels ¿Sirven para captar clientes en la Abogacía?

La captación de clientes ha cambiado radicalmente en los últimos años, y en 2025, las redes sociales siguen marcando la diferencia entre un abogado invisible y uno con una marca personal sólida y una cartera de clientes en crecimiento.

Dos plataformas lideran este cambio en cuanto a contenido de alto impacto: Instagram y TikTok, especialmente a través de los formatos Reels y vídeos cortos. Si todavía te preguntas si deberías estar ahí, la respuesta corta es: sí, pero con estrategia.

¿Por qué Instagram y TikTok son relevantes para un abogado?

Aunque no lo parezca a primera vista, estas plataformas no son solo para bailarines o influencers de lifestyle. Cada vez más usuarios las utilizan para informarse, buscar soluciones rápidas o descubrir profesionales que comuniquen de forma directa y clara. Y entre ellos, están tus potenciales clientes.

Hoy, la atención se disputa en segundos. Y quien sabe traducir lo complejo a lo sencillo, gana. Ahí es donde entra en juego el vídeo corto.

Además, el algoritmo de ambas plataformas potencia el alcance orgánico, lo que permite que incluso cuentas con pocos seguidores tengan visibilidad si el contenido es bueno. Es una oportunidad democratizadora para cualquier abogado que quiera posicionarse, sin necesidad de grandes presupuestos.

¿Dónde deberías estar si eres abogado emprendedor?

La elección depende de tu especialidad, tu público objetivo y tu estilo de comunicación:

• Instagram es ideal si tu perfil es más visual, si trabajas en áreas de derecho que afectan directamente a consumidores o pequeñas empresas (laboral, familia, penal, extranjería, consumo, herencias…). También si ya tienes una red profesional activa o quieres construir autoridad.

• TikTok es la red que más favorece el crecimiento rápido, especialmente si te sientes cómodo/a comunicando de forma espontánea, directa y educativa. Si tu público objetivo está entre los 25 y los 50 años, también es relevante (sí, ya no es solo para adolescentes). Tiene una gran capacidad de viralización y posibilidad de derivar a otras plataformas con mayor conversión ese tráfico de potenciales personas interesadas en tus servicios.

Lo ideal en muchos casos es reutilizar contenido en ambas plataformas, adaptándolo mínimamente al estilo de cada una.

Qué debería hacer un abogado en estas plataformas (y qué no)

No se trata de hacer “vídeos graciosos” ni de viralizar por viralizar. Se trata de educar, posicionarte y generar confianza. Aquí algunas ideas clave:

1. Resolver dudas frecuentes

Graba vídeos de 30 a 60 segundos respondiendo a preguntas que te hacen tus clientes:

• “¿Qué hacer si recibo una demanda laboral?”

• “¿Cuáles son los pasos para divorciarse en España?”

• “¿Cuánto tarda un procedimiento de herencia?”

Hazlo claro, directo y con lenguaje comprensible.

2. Comentar casos reales (anonimizados) o noticias

Utiliza una sentencia reciente, una noticia legal o un tema del momento para aportar tu visión profesional. Explica por qué es relevante, qué implica y qué precauciones tomar.

Este tipo de contenido combina actualidad + autoridad.

3. Desmontar mitos legales

Ejemplo: “No, no puedes despedir a un trabajador solo por estar de baja médica”. Estos vídeos funcionan muy bien porque rompen ideas comunes y despiertan curiosidad.

4. Explicar procesos en pasos sencillos

Guías rápidas: “3 pasos para reclamar una cláusula suelo”, “Cómo hacer una reclamación de cantidad paso a paso”. Si aportas claridad, la gente te recordará cuando necesite ayuda.

5. Mostrar tu día a día (con equilibrio)

Puedes enseñar cómo es tu trabajo de forma cercana: desde preparar una demanda hasta asistir a una vista (sin revelar datos, por supuesto). Esto genera cercanía y confianza, algo clave en profesiones tan personales como la abogacía.

6. Llamadas a la acción suaves

Al final del vídeo puedes decir algo como: “Si te encuentras en esta situación, te explico más en los comentarios” o “Si te ha pasado algo parecido, escríbeme y te oriento”. Sin presión, sin vender directamente. Funciona.

Qué deberías evitar

• Lenguaje jurídico excesivo: No estás hablando para compañeros abogados, sino para personas que probablemente no entienden tecnicismos. Habla como si explicaras el tema a un familiar. Pierde el miedo a no ser extremadamente preciso, trata de ser divulgativo.

• Contenido sin foco: Publicar por publicar no sirve. Tienes que tener clara tu audiencia y el problema que estás resolviendo.

• Vídeos impersonales: La gente conecta con personas, no con logos ni frases institucionales. Muestra tu cara, tu tono, tu estilo.

• Descuido en el formato: No hace falta que produzcas vídeos con calidad cinematográfica, pero asegúrate de tener buena luz, buen audio y un fondo neutro o profesional.

¿Y si no te gusta exponerte?

Es normal que muchos abogados no se sientan cómodos delante de una cámara. Pero recuerda: no necesitas ser perfecto/a, solo útil y claro/a. La naturalidad, en 2025, gana siempre a lo rígido.

Además, puedes comenzar con vídeos donde solo se escuche tu voz y se vea una presentación o un esquema legal animado. Con el tiempo, ganarás confianza.