10 cosas que odiamos los Abogados

la abogacía en general, y los abogados en particular, no gozan de una gran estima por parte de la sociedad. Tanto clientes como jueces coinciden en criticar a estos profesionales por su seriedad, frialdad, impuntualidad… No obstante, también existen muchas situaciones y actitudes que los abogados detestan en el desarrollo de su profesión. En esta entrada os contamos 5 cosas que los abogados odian de sus clientes y 5 cosas que los abogados odian de los jueces.

Dentro de las cosas que los abogados odian de sus clientes encontramos:

1. Que se expliquen mal, omitan datos importantes y mientan.

Cuando un abogado se enfrenta a un nuevo caso y a un nuevo cliente, muchas veces la primera sensación mutua es de desconfianza, hecho que queda reflejado en los datos aportados por el cliente sobre el caso en cuestión. No contar los hechos de manera ordenada y detallada, omitir adrede detalles importantes, mentir a su propio abogado… Estas cosas dificultan la labor del abogado cuando su tarea es defender los intereses de su cliente.

2. Las llamadas fuera de la jornada laboral.

Que los abogados son profesionales muy ocupados lo sabemos todos. No obstante, esto no implica total libertad para que el cliente llame al abogado a cualquier hora del día o cualquier día de la semana. Se deberían respetar sus horas de descanso y este es un aspecto que no muchos clientes tienen en cuenta.

3. Cuestionamiento del criterio del abogado.

En ocasiones, parece que muchos clientes saben más de leyes que sus propios abogados, lo que les lleva a cuestionar el criterio elegido por el abogado para el caso. Esto, sin duda, irrita al abogado, que lo único que pretende es defender el interés de sus clientes, y no entorpecerlo.

4. Problemas con los honorarios.

Cuestionar los honorarios del abogado, compararlos con los de otros despachos de abogados, demora o impago de los honorarios… son otros problemas añadidos con los que los abogados tienen que lidiar diariamente.

5. Falta de valoración de su actividad.

Sin duda alguna, la mayor dificultad que todos los abogados destacan en relación con su trabajo es la falta de valoración del esfuerzo llevado a cabo tanto por sus propios clientes, como por la sociedad en general.

Por otra parte, las 5 cosas que los abogados odian de los jueces son:

6. Impuntualidad.

“Consejos vendo y para mí no tengo”. Esta podría ser la frase que los abogados repiten una y otra vez a jueces y juzgados. Mientras los abogados trabajan largas horas para cumplir con los plazos establecidos por los juzgados para la presentación de escritos de demanda, de contestación, etc. los juzgados tardan meses y meses en convocar los juicios y emitir las sentencias. Muchos clientes acusan a los abogados de esta tardanza sin saber que, en realidad, la dilación depende de los juzgados.

7.  Falta de atención en el juicio.

Otra cosa que los abogados llevan muy mal durante los juicios es tener que repetir las cosas varias veces porque el juez no se ha enterado bien.

8. Dejadez.

No se puede generalizar, pero muchos abogados se quejan de los jueces que apenas prestan atención en el juicio, que no toman ni una nota, que no se molestan en leer los autos, que contestan con monosílabos… y esto irrita.

9. Interrupciones.

Otra cosa que los abogados detestan de los jueces es que les interrumpan mientras hablan o exponen los hechos o pasen el turno de palabra a otra persona para ahorrar tiempo. Muchas veces, por este tipo de cuestiones, los juicios acaban convirtiéndose en un mero trámite, en lugar de ser la verdadera discusión de un conflicto jurídico.

10. Sentencias que no se entienden.

Algunos jueces parece que redactan sus sentencias en castellano medieval. El complejo uso de vocablos y conceptos jurídicos hacen muy difícil la lectura de algunas sentencias y, por tanto, la explicación de la sentencia a los clientes. Los jueces deberían recordar, de vez en cuando, que el Derecho es de todos y para todos.