Hasta hace poco, los más peludos de nuestros hogares a la luz de la ley eran considerados objetos y frecuentemente sometidos a actuaciones vejatorias ya que era común la creencia de que no sentían dolor, felicidad o tristeza alguna. Gracias a frecuentes movilizaciones y un necesario consenso político, esto ha cambiado. Con el nuevo año, a partir del 5 de enero de 2022, fecha de entrada en vigor la nueva normativa, los animales contarán con una protección jurídica que los considere seres dotados de sensibilidad.
Dando un paso al frente en la modernización necesaria de nuestro ordenamiento jurídico, se aprobó el 15 de Diciembre la Ley 17/2021 sobre el régimen jurídico de los animales por la que nuestras mascotas no podrán ser embargadas, hipotecadas, abandonadas, maltratadas o apartadas de uno de sus dueños en caso de separación o divorcio sin tener en cuenta su bienestar o su protección. Esta reforma se hace precisa no sólo para adecuar el ordenamiento jurídico a la verdadera naturaleza de los animales, sino también a la naturaleza de las relaciones, particularmente las de convivencia, que se establecen entre estos y los seres humanos.
Cumplimos así con la exigencia europea recogida en el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) del bienestar animal considerados como seres sensibles y que su naturaleza es bien distinta de las cosas o bienes. En nuestros vecinos Francia y Portugal han incorporado disposiciones en su Código Civil que reconocen a los animales como seres sintientes, y prevén expresamente la promulgación de leyes especiales que velen por su protección.
Modifica así importantes códigos normativos como el Código Civil, la Ley de Enjuiciamiento Civil o la Ley Hipotecaria, actualizando conceptos referentes en materia matrimonial de convivencia y cuidado de las mascotas e incluso atendiendo al vínculo existente y la concurrencia entre los malos tratos a animales y la violencia doméstica y de género y el maltrato y abuso sexual infantil, se contemplan limitaciones a la guarda y custodia en casos de antecedentes por maltrato animal ejercido como forma de violencia o maltrato psicológico contra aquellos.
Concretamente, se modifica el artículo 605 de la Ley de Enjuiciamiento Civil, para declarar absolutamente inembargables a los animales de compañía en atención al especial vínculo de afecto que les liga con la familia con la que conviven. Esta previsión rige sin perjuicio de la posibilidad de embargar las rentas que dichos animales puedan generar.
Igualmente, con la finalidad de protección al animal se modifica el artículo 111 de la Ley Hipotecaria impidiendo que se extienda la hipoteca a los animales colocados o destinados en una finca dedicada a la explotación ganadera, industrial o de recreo y se prohíbe el pacto de extensión de la hipoteca a los animales de compañía.
La modificación del Código Civil es más extensa, pero nos centramos principalmente en su artículo 333 según el cual “todas las cosas que son o pueden ser objeto de apropiación se consideran como bienes muebles o inmuebles”, se concreta que los animales son seres vivos dotados de sensibilidad, lo que no excluye que en determinados aspectos se aplique supletoriamente el régimen jurídico de los bienes o cosas.
De este modo, los animales están sometidos solo parcialmente al régimen jurídico de los bienes o cosas, en la medida en que no existan normas destinadas especialmente a regular las relaciones jurídicas en las que puedan estar implicados animales, y siempre que dicho régimen jurídico de los bienes sea compatible con su naturaleza de ser vivo dotado de sensibilidad y con el conjunto de disposiciones destinadas a su protección.
Como breve resumen del régimen jurídico animal, analizamos las siguientes obligaciones y prohibiciones para los dueños de animales domésticos:
- Para poder tener perros, se deberá de realizar un curso formativo obligatorio como forma de garantizar que el dueño está capacitado y concienciado de lo que supone tener un animal, así como de todos los cuidados básicos necesarios que necesita.
- El sacrificio animal queda terminante prohibido salvo excepciones justificadas por motivos de salud como enfermedades incurables para evitar el sufrimiento. Queda fuera así la posibilidad del sacrificio por cuestiones económicas, de espacio, comportamiento o del mero cansancio del animal. Como excepción a esta prohibición quedan fuera los animales objeto de experimentación y fines científicos o de enseñanza.
- Se prohíbe el maltrato animal o su agresión física, así como cualquier práctica que les pueda producir sufrimientos, daños físicos o psicológicos u ocasionar su muerte.
- Se regula la prohibición del abandono animal, especialmente ocasionado en fechas festivas como Navidad. Antes de integrar un nuevo miembro a la familia, analiza tu situación y si vas a poder hacerte cargo de una responsabilidad tan importante.
- Se impide la aparición de animales en espectáculos o actividades culturales, publicitarias o su participación en peleas y el aprendizaje a que se vuelvan agresivos con otros animales o personas. Relacionado con los festivos tradicionales como Navidad o Semana Santa, Se prohíbe el uso de animales en exposiciones de belenes, cabalgatas o procesiones, en las que se mantenga al animal de forma antinatural conforme a las características propias de su especie, o inmovilizado durante la duración del evento.
- Prohibición del uso de accesorios que les causen dolor como collares o correas eléctricas, excepto las permitidas reglamentariamente.
- Se suprimen las mutilaciones y modificaciones, causadas generalmente por motivos estéticos, exceptuando las relacionadas con la salud animal y la esterilización para anular o limitar su reproducción.
A modo de resumen, la nueva normativa se adapta al nivel de muchos países de la zona europea respecto a entender a las mascotas como seres con sentimientos, capaces de sentir el dolor como una persona humana. Así como su capacidad para estar felices. Era necesaria una urgente modificación de su régimen jurídico exigido por el avance social que vivimos en los últimos tiempos y que, como país europeo, se venía exigiendo años atrás. Pero, todavía nos queda mucho por hacer.